Monday, August 24, 2009

La tregua...

"Entonces, en el final de todas las cosas, o que al menos uno lo siente así, cree que la batalla de la vida se ha perdido completamente. No tiene caso seguir luchando, sólo bastaría entregarme sencillamente a la Muerte, manifestarle mi rendición, y luego cerrar mis ojos… Y sí, lo estaba haciendo. El Universo de por sí actúa de manera misteriosa, y me cautiva en parte cuando lo hace. Algo hice… algo hicimos… algo hiciste, no lo sé. Ya mi cuerpo no respondía con la misma energía del ayer. Iba arrastrándose, tal perro hambriento. Y aún siento que debo insistir en recalcar mi admiración hacia el misterio de la Vida. Esas extrañas maneras con las cuales revierte situaciones y logra que quien estaba muriendo, estaba sino conquistando. Es así, amor mío, como mi triste y vacío mirar dio contigo, y no quiso apartarse de ti. Había izado una vez más las banderas cruzadas, refinado la vieja armadura que porté por milenios y milenios, afilando mi gran espada, reforzando el endurecido escudo. Oh mi amor, el sólo hecho de imaginarte besándome, mueve mi día a pasos de gigante, sintiendo que el sol se enfoca sólo en mí, marchando con aire victorioso, sin temor, hacia lo que otros consideran un infierno.
Tu amor fue la chispa que encendió este fuego eterno en mí. La llama de la Dignidad flamea una vez más, erradicando por completo el frío de la desesperanza. No queda más que seguir. Los días del fatídico Ayer aún me acosan, sin embargo, gracias a ti preciosa mía, poseo la fortaleza de marchar sin mirar atrás. Desiertos, mares, montañas y selvas es lo que me depara en este nuevo viaje emprendido, con sólo tu recuerdo en mi escudo, protegiéndote. Que el sabor de tus labios quede impregnado en los míos, el tacto de tu piel en mis manos recubiertas de acero.
Pronto llegaré, amor mío. Las grandes batallas cesarán por unos días y podré al fin palpar la felicidad, en forma de Tú.
Tú… pronto te miraré, pronto te tocaré, pronto te besaré. Eres la tregua que tanto he deseado. Ahora marcho lentamente hacia ti. Te amo"

Thursday, August 06, 2009

Para Denisse...

¡Cuántos miles de días, corazón! ¡Cuántos miles de días ansiando tu arribo divino! ¡Mi corazón viejo, mi cuerpo demacrado, mi mente cansada, y mi alma agotada ya comenzaban a desesperar, y de pronto apareciste de la nada, tal cual polvo de estrellas disparadas al infinito del Universo, topándose conmigo, en medio de la eternidad! Si tan sólo supieras o vieras siquiera cuán agradecido está mi corazón ahora que al fin llegaste, amor mío. Me cuesta… me cuesta decirlo. Me cuesta reconocerlo, más aún reconocerlo. Los miles de días que pasé inmerso en ese enorme campo de batalla, combatiendo y luchando contra cualquier ser que se me cruzaba en mi camino hacia ti, mi amor. Mi escudo ya roto estaba. Mi armadura ya no lo aguantaba. Mi espada ya sin filo, sin embargo… llegaste. Renovaste mis días, mi moral y mi alegría. Cinco minutos, imaginándome a tu lado, son miles de millares de enemigos derrotados.

No hay Dios. Nunca lo ha habido… y Esperanza me había abandonado hace un largo tiempo. La Muerte ya reía de mí, de mi patético estado. De repente, vi tus ojos… Tus ojos, mi niña. Todo dolor quedó en el olvido. Mis tormentos por igual. Tu existencia, tu presencia por sí sola, desvanecieron todo mal de mi ser, y trajo consigo minutos de felicidad. Minutos al menos… y al fin. Ahora tiene sentido batallar… después de tantos años.

Ya puedo levantarme una vez más. Ya puedo gritar y enaltecer mi alma en el nombre de lo más bello que he visto en esta vida… Tú.